El número 2 en el tarot y su significado en los cuatro palos de la baraja
Generalidades del número 2
El número 2 en el tarot, ante todo, representa la dualidad que es la existencia de dos fundamentales principios, conceptos, cosas o energías, que están en oposición entre sí. Es donde el pensamiento comienza a tomar forma en realidad.
Las mentes humanas están orientadas a ver las relaciones entre dos cosas, por lo general cosas opuestas.
A menudo nos expresamos de esta manera, el uso de conceptos opuestos para llegar a lo que queremos decir. Decimos que algo es bueno o malo, luz o oscuridad, masculino o femenino, dulce o amargo. Se dice que no podríamos conocer la felicidad si no fuera por haber experimentado su opuesto, la tristeza.
De este modo, el número dos en el tarot se trata siempre de una dualidad, de estar entre dos cosas, de una decisión a tomar, de una elección que hacer.
La asociación planetaria del número dos es la Luna. Este es también el cuerpo celeste asociado con la Suma sacerdotisa, que es también el Arcano Mayor II, ¿no es ingenioso? La Sacerdotisa es la energía femenina que actúa como mediador entre dos cosas opuestas.
Ella tiene que ver con la dualidad. Ella es capaz de encontrar la paz en la ambivalencia, entre sostener dos ideas opuestas a la vez y el reconocimiento de que pueden ser ambas verdaderas.
Debido a que la Sacerdotisa es la energía pasiva, los dos de en el tarot a menudo muestran un tiempo de espera, de decidir, de equilibrio, de sopesar, de discernir. Hay un momento de reconocimiento en los dos de ver lo que es lo mismo y lo diferente, de comparar y contrastar.
El número 2 en los Arcanos Menores
El 2 de espadas
El Dos de Espadas representa el intento de reconciliar dos pensamientos o argumentos en contra. Hay algunas personas que son muy “blanco o negro” en su pensamiento.
Se sienten incómodos con la ambivalencia y el procesamiento que requieren para tamizar a través de los lados y argumentos opuestos es mucho más corto.
Simplemente van decidir su posición en base a lo que ya piensan y que previamente hayan decidido. Para ellos, el tiempo de permanencia entre las dos de espadas es breve.
Otros pasan mucho tiempo en sopesar los argumentos, considerando la evidencia, deliberando, debatiendo y pensando en cómo conciliar las dos opciones, en lugar de elegir Esto también nos lleva a la asociación de los dos con la Justicia.
En muchas barajas la Justicia se numera once que, una vez reducida (1 + 1 = 2) nos entrega también un 2. El Dos de Espadas está más estrechamente relacionado con la Justicia a causa de la imaginería de la espada. Como el juez también maneja una espada, delibera y decide, por lo que el Dos de Espadas representa que es tiempo de toma de decisiones.
Estas serán puramente intelectuales, guiadas por la razón y la lógica, tratando de que las emociones no intervengan. Cualquiera sea la elección, será el resultado de un frío y detallado análisis.
El 2 de copas
Mientras que los dos con frecuencia muestran una división entre cosas opuestas, también pueden mostrar una cooperación y reciprocidad entre dos cosas, personas o ideas. Esto está muy bien marcado en el dos de copas.
El Dos de Copas retrata, en particular, este aspecto del significado del número dos muy bien. El Dos de Copas muestra la imagen de una pareja en el amor, pero de ninguna manera se limita a esta experiencia. El Dos de Copas representa la fusión de emociones.
Se podría decir que concilia las emociones opuestas y los reúne, por lo que en lugar de competir entre sí, se complementan entre sí. Para utilizar el ejemplo de dos nuevos amantes, las emociones iniciales del encuentro, la competencia, el nerviosismo y una sensación dichosa y confortable coexisten en la reunión.
Mariposas en el estómago, mientras que el aleteo al mismo tiempo les atrae el uno al otro. Malestar emocional, más atracción emocional. Del mismo modo, la imagen muestra a dos personas, a menudo un hombre y una mujer, claramente opuestos por género, fusionándose juntos y bebiendo en una actitud de compartir cada uno su copa.
Por lo tanto, el Dos de Copas representa la unión armoniosa de dos opuestos en un nivel emocional (copas). Aquí hay una dualidad pero no tanto enfrentada a hacer una elección (que igualmente hay que hacerla…amar o no, entregarse o no, confiar o no, etc) sino que esta dualidad tiende a fusionarse o cuanto menos a compartir lo que cada parte ofrece en su diferencia.
Aquí el número dos en el tarot nos habla de unión y asociación, ser dos potencia y mejora el ser uno solo.
El 2 de bastos
El Dos de Bastos es en cierto modo similar al dos de espadas en el que hay un proceso de toma de decisiones en marcha, pero con los bastos las decisiones son más orientadas a la acción.
En las espadas, la decisión es entre dos cosas diferentes y acaso opuestas, en tanto en el dos de bastos, la decisión debe hacerse entre dos cosas muy parecidas acaso igualmente buenas las dos. Las opciones son bastante iguales, pero una producirá el mejor resultado.
El problema es, no se puede tener las dos cosas. Tú tienes que decidir qué acción o tras qué curso vas a lanzar tus esfuerzos. Hay una sensación de poder en el Dos de Bastos, de confianza y capacidad, a diferencia del Dos de espadas, que en serio no quiere tomar la decisión sino que más bien mantener una frágil paz entre los argumentos opuestos.
El Dos de Bastos reconoce, los ojos muy abiertos, que la elección debe hacerse y es sólo una cuestión de sentimiento que una opción te apasiona más, que la acción producirá el mejor resultado, que la idea tiene más potencial. La fricción o conflicto entre ellas es por lo general debido a que ambas son buenas ideas, y se oponen pues sólo tienes los recursos para lograr uno de ellos.
Aquí el dilema es complejo pero siempre positivo, ya que ambas opciones son favorables, aunque una lo será más que la otra y la cuestión estriba en que escojas el mejor resultado posible, y esto estará dado muy posiblemente por lo que te haga sentir a nivel de apasionarte o entusiasmarte.
El 2 de oros
El Dos de Oros trae otra vez el aspecto central de los dos que es el equilibrio entre los opuestos. Al igual que el dos de espadas, este dos de lo material no está interesado tanto en la elección entre las opciones, pero si tratando de equilibrar de forma indefinida.
Esta podría ser la persona que hace juegos de malabares entre dos puestos de trabajo, o trabajo a tiempo completo y la escuela. O dedicarse por igual al trabajo y al ocio o la familia, en tiempos equilibrados para cada cosa.
Sus manos están definitivamente llenas y no es una tarea fácil de equilibrar estas dos cosas, pero ambas son prioridades para él, por lo que la tiene complicada en tratar de mantener las dos cosas en el aire. Los conflictos son un hecho, pero él está convencido de que puede manejarlos.
Sin embargo, los números dos en el tarot son inestables y tensan con la polaridad. Representan los pequeños comienzos, no en sí el logro. Ellos son el tiempo entre el inicio y los primeros pasos para la creación real. Los dos son un tiempo cuando se piensa mucho, se siente mucho, se debe o urge tomar una decisión, pero nada sustancial ha ocurrido todavía.
Además, sólo hay determinado tiempo en que se puede permanecer en ese estado tenso. La decisión, el paso siguiente, debe hacerse y se hará irremediablemente.
En el Dos de Espadas, este tiempo “muerto” de indecisión o de dilema tiene una duración más bien corta. El Dos de Copas pierde su brillo con bastante rapidez como cualquiera que haya sucumbido en el amor puede dar fe, y el afán de buscavidas en el Dos de Bastos no va a perder demasiado tiempo en la planificación porque quiere ver a sus ideas puestas en marcha tan rápido como sea posible.
En el Dos de oros es quizá donde el tiempo más pueda extenderse, pues dependerá de cuánta habilidad para los malabares se tenga. Se puede estar largo tiempo equilibrado dos cosas muy opuesta y hacerlo bien, a la vez que puede cansarnos muy rápido y ya no poder controlar cosas que tienen además sus propias reglas, movimientos e imprevisiones.
El número dos en el tarot nos brindan así un panorama abierto muy rico en la interpretación y llevan a que el consultante se haga preguntas fundamentales, se plantee de verdad las cosas, esté abierto a que hay opciones, pero todo se reduce a elecciones siempre, y dependiendo de las elecciones que se hagan, la realidad se construirá de inmediato en torno a ello, por desgracia o por fortuna.